Un pibito argentino

Viaje a Argentina

Hola mi nombre es Sergio vivo en España estos hechos me ocurrieron hace unos años y jamas lo conté a nadie, hace unos días descubrí esta página y he decidido contarlo aunque con un poco de miedo y no se, también un poco de nervios por todo lo ocurrido.

Tengo 30 años pero esto ocurrió cuando yo tenia 28, mi hermano mayor esta casado con una argentina y llevan varios años. Con el tiempo el la trajo a casa y la conocimos. Yo y mi hermano siempre hemos tenido mucha relación y ese verano me llevo con el a Argentina pues el ya conocía a la familia de su novia también, mis padres no pudieron subir por el trabajo.

Allí conocí a toda la familia de su novia y entre ellos a un sobrino suyo de 9 años llamado Ezequiel. Son muy buenas personas todos y Ezequiel era muy juguetón y simpático para su edad y de momento tomé confianza con el. A mi me dejaron una habitación de invitados para dormir,solo estaría dos semanas.

Por las tardes solía ir a la habitación a descansar y esperar para salir con mi hermano y su novía a ver lugares de Buenos Aires, en la casa vivían solo mi cuñada y sus padres aunque su segunda hija iba todas las tardes con sus dos hijos Ezequiel y Gonzalo. Ezequiel solía subir a mi habitación a hablar conmigo pues como ya he dicho tomamos mucha confianza.

Una tarde estando los dos, su hermanito de 6 años entro ala habitación y Ezequiel le dijo que se fuera, yo le dije que porque lo trataba tan mal y me dijo que aun era muy pequeño y se aburría jugando con el. Le pregunte a que jugaban y me dijo que a nada que solo se aburría con el y le dije que era normal pues aun era muy pequeño pero era su hermano y debía respetarlo.

Tras hablar un poco me dijo que solo le gustaba jugar con el al chupa chupa, le dije que era ese juego y el me dijo que se chupaban sus rabitos, me quede un poco atónito y solo llegue a decir si sus padres sabían eso y el me dijo que no que era un secreto. Le pregunte el porque me lo conto a mi y el me dijo que yo era su amigo, me dijo que su hermanito se lo chupaba muy poco porque le daba angustia pero el si lo chupaba mas. Entonces le pregunte si a el no le gustaban las chicas y riendo me dijo que si sobre todo sus pechos, un poco dudoso le dije que lo que hacía con su hermanito era muy extraño y si le gustaban las chicas porque chupaba su rabito. El entre risas me dijo que daba mucho gustito y yo cada vez estaba mas sorprendido.

Aquella tarde no ocurrió mas nada pero quede un poco asustado por todo, no sabía si contarlo a alguien o si el niño me mentia, pero no era una mentira típica de un niño de 9 años, también me excite un poco y jamás pensé hacerlo con un niño.

No recuerdo si fue al día siguiente o a los días cuando de nuevo ala tarde Ezequiel subió a mi habitación, nos quedamos viendo la televisión y al rato me dijo que hablaramos porque se estaba aburriendo, le dije que jugara con su hermano que estaba abajo con los demas pero el me dijo que prefería estar conmigo, entonces le pregunte que quería hacer para no aburrirse y el me dijo que no sabía.

Le pregunte si lo que me contó del chupa chupa con su hermano era verdad y me dijo que si entre risas, le pregunte si lo había hecho con otra persona y me dijo que no. Volvi a preguntarle que si lo hubiera echo con otra persona se lo hubíera contando a su madre o a su padre o a alguien y me dijo que no pues le daba verguenza.

Estaba en un mar de dudas tenía unas ganas tremendas de que ese niño me la chupara pero era un acto que no podía hacer,era un niño de 9 años.

Al día siguiente todos fuimos ala piscina y como era normal Ezequiel soño estuvo pegado a mi, todos jugábamos en la piscina y al rato todos salieron fuera y yo me quede con los dos niños, había tomado muchas cervezas antes y estaba un poco “contento”. Entre juegos con ellos le dije le chuparías ahora el rabito a tu hermano y el riendo dijo que no que allí en la piscina había muchas personas, entonces le pregunte si lo haría estando solos y me dijo que bueno. Entonces con el efecto de las cervezad le dije que si me lo haría a mi y entre risas dijo que si pero que le daba verguenza. Le pregunte porque y me dijo que yo era mas mayor, entonces le dije que si otro día en mi habitación me lo haria con la luz apagada y me dijo que si con la cabeza.

Cuando se me pasaron los efectos de la cerveza y volvimos a la casa el miedo se apoderó de mi, lo que le había propuesto no estaba bien y mas era un niño, tenía mucho miedo pero a la vez una gran excitación.

Al día siguiente estaba ya en mi cuarto cuando escuche llegar a la cuñada de mi hermano con los niños, los nervios se me metieron en el estomago. Al rato subió Ezequiel como de costumbre y su hermanp también aunque Ezequiel le dijo que se fuera. Se tumbo a mi lado y me dijo que hacía le dije que viendo la televisión. El se quedo mirándola pero se notaba mas nervioso que de costumbre, al rato me dijo que se aburría, le dije que quería hacer y me dijo que no lo sabía.

Me armé de valor y le dije jugamos a lo que dijimos en la piscina y el entre risas me dijo que le daba verguenza, estaba ya muy excitado y le mostre mi polla bajo las sabanas el un poco sorprendido me dijo que grande es, le dije que la chupara y de nuevo dijo que le daba verguenza.

Me levante y riendo le dije que hiciera silencio y cerre las ventanas, la habitación quedo oscura solo se veía la luz de la televisión, me acoste y le dije que así no le daria verguenza. Le dije que si con su hermano no le daba conmigo tampoco. No tapamos con las sabanas entero quedando en penumbra bajo ellas, le dije que lo hiciera y el me preguntó si la tenía limpia le dije que mucho y era la verdad.

De nuevo le dije que la chupara y mientras hablariamos de chicas, el se agacho y con su lengua empezo a lamer mi capullo, mientras chupaba le pregunta cosas como si le gustaban mas las chicas morenas o rubias o con las tetas grandes, el contestaba mientras chupaba mi capullo. Puedo asegurar que senti tanto placer que toda la polla se me durmió, sentía un gran hormigueo. Le pregunte si a su hermano se la chupaba asi y me dijo que si pero era muy pequeña, le di unas instrucciones para que diera los lenguetazos mas lentos y pausados mientras que yo empece a masturbarme lentamente. Dejamos de hablar y estuvimos haciéndolo en silencio.

Me corrí al rato dando espasmos y me gire para no mancharlo ni asustarlo me había dejado el capullo todo lleno de saliva.

Hubo unas dos mamadas mas hasta, que volví a España pero nunca olvidaré lo ocurrido con el, en una ocasión mas mi hermano me propuso de subir pero por miedo le dije que no y aun no he vuelto mas. Pero puedo asegurar que es real y es un recuerdo muy bonito.

Fuente: SexoSinTabues

Autor: Anonimo